Hace un año que vivimos en ésta casa. Llegamos justo en la primavera del 2010. Nos gustó porque el lugar ofrecía muy buen espacio para los 3 miembros ya existentes de la familia y el que venía en camino (hoy Mariana). Buenas áreas para juego, espacios para la televisión, cocina de buen tamaño (para preparar los exquisitos manjares de mamá), y hasta un nido de pajaritos frente a la puerta de la entrada.
Debo confesar que soy muy mala observadora. No me percaté del nido hasta después de unas semanas de la mudanza cuando noté que no éramos 3 (4... pues Mariana ya contaba) sino 7 inquilinos. Una pajarita y sus tres pajarillos ocuparon el nido. Al poco tiempo ya habían volado a hacer su vida. Les tomó mucho menos de lo que les tomará a mis polluelas dejar su nido. Si no las termino corriendo antes.
Éste año el nido se ocupó de nuevo. No sabría decirles si es la misma pajarita. Pero se repite el número de huéspedes. La diferencia es que éstos pajaritos son bien canijillos. ¡Cómo dan guerra! El "pi pi ri pi pi" se escucha todo el día. Literal, todo el día. Cuando pasamos el tiempo en la planta de arriba ni nos enteramos, pero estando abajo ¡ufff! se hacen notar.
La más emocionada con la idea de tener pajaritos en casa es Ana Luisa. Sale al jardín y les pone migajitas de pan. En el jardín de atrás, pues si se los dejamos muy cerquita no lo toman. Ignoramos el por qué.
Ayer en la tarde observábamos a los pajaritos. Y lo que vi me llevó a mandarle mensaje de texto a Chuy: "Méndigos pájaros, traen a la pajarita en friega". Él me respondió con una risa y un "ayúdale".
¿Qué vi? Ahí les va.
* Pajaritos pidiendo comer de forma desenfrenada
* Pajarita ir y venir con comida que no alcanza, pues son 3 boquitas... piquitos que alimentar.
* Pajaritos encimándose entre sí para agandallar la comida.
* Pajarita le da a uno y los otros dos intensifican su "chillido" al puro y mero estilo "yo mamá... yo mamá... yo mamá".
* Pajarita vuela al estilo flash para traer más comida para los tiranos, digo, bebés.
* Pajarito que ya comió vuelve a pedir comida.
* Pajarita voltea a mirar a uno, a otro, a otro más, tratando de deducir quién le falta por comer. (Todo ésto a la velocidad del rayo).
* Pajarita manda a la goma al que pide repetir plato.
* Pajaritos comen y siguen con el "mamaaa... mamaaa... mamaaa".
* Pajarita sale volando alejándose del nido ... y no vuelve. (Al menos hasta dentro de un rato).
¡Dios! Recuerdo haber pensado: "¡esa es mi vida!". Pajarito 1 quiere, pajarito 2 pide, pajarito 1 necesita, pajarito 2 demanda, pajarito 1 exige, pajarito 2 se enfada, pajarito 1 se encela, pajarito 2 comida, pajarito 1 pipi, pajarito 2 popó (disculpen la precisión), pajarito 1 llora, pajarito 2 grita. ¡Si fueran 3 me vuelvo loca!... ¡pajarita santaaa!.
Vino a mi mente un malévolo pensamiento: "¿Quién fuera la pajarita que puede darse la vuelta y dejarlos en el nido mientras seguro va pensando 'váaayanse mucho a la ... tostada' hijos de toda su..."?
Pero tal como les decía, al rato regresó a atender a sus crías. Y seguramente no recibirá ni un gracias a cambio. Yo por lo menos tengo sonrisas, besos, abrazos de koala y los "gashias" de mi Bicho... porque la otra todavía no habla... al menos no dice otra cosa que "ta ti ta ta ta". Pero estoy segura que esos balbuceos en el fondo significan "eres lo máximo mamá, sin ti no vivo"... o algo parecido.
Aunque suene a blasfemia, creo que iniciaré un movimiento pro canonización de la pajarita y/o cualquier especie animal que tenga que vivir con el "mamaaaa... mamaaaa... mamaaaa" y no salga corriendo en dirección opuesta abandonando el hogar.
Tal cual, señoras y señoritas, así nos ganaremos el cielo.
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