lunes, 5 de septiembre de 2011

¿Más barato por docena?

A 5 días de cumplir un mes sin escribir. Creo que ahora sí me excedí con el receso. Para ser sincera, no entré al Blog porque no quería contar nada. Había cosas buenas, muchas, pero fueron días de adaptación a una nueva ciudad, en los que uno empieza a encontrar "peros" y a extrañar lo que tenía.

Yo he aprendido, bueno, escuchado, aprendido lo que se dice aprendido aún no, que : "si no tienes nada bueno que decir, mejor no digas nada". Soy muy bocona y la mayor parte del tiempo hablo desde el estómago. Así que ésta vez, en un intento de ejercitar la madurez, mejor me di tiempo y espacio de las Redes Sociales.

Hoy regreso. Y espero que sea con regularidad. La vida avanza como lo haría en cualquier otro lugar. Niñas creciendo, una en la escuela, la otra conmigo. Salidas, vueltas, super, el infaltable Costco de mi Bicho, Circo, vuelta en el trenecito del centro comercial, comidas con familias... Bueno, ya hasta hubo fin de semana con abuelos y tíos que se echaron la oportunísima visita.

Ayer fue un muy buen día. Nos invitaron a un rancho a comer. Seríamos nosotros, los anfitriones y otra familia.

Vale la pena mencionar que el lugar era impresionante. Una hacienda hermosa, rodeada de verde, con todas las comodidades, y podría asegurar que hasta más que en mi casa... ¡ja!

A mi Bicho se le fueron los ojos por los caballos desde que llegamos. Pero moría de hambre, así que llegó directo a comer, con la pena. Ella se sentó en su silla y a entrarle a la sopa, el arroz y las albóndigas. Orgullosamente puedo comentar que sin ensuciarse ni medio centímetro.

La anfitriona se lució preparando unos chiles en nogada exquisitos, con la receta de la nana de la familia de principios de siglo. Sus 5 hijos estaban ahí. Las dos menores se encargaron de hacerle la tarde amena a mis 2 princesas, y lo consiguieron.

Desde que recibí la invitación hubo algo que llamó mi atención. Hasta lo publiqué en Twitter y Facebook. Me dijeron que conoceríamos otra familia, pero no completa, pues únicamente irían 5 de sus hijos. ¡Ah no, bueno!

- ¿Pues cuántos son?
- 10

Conozco familias numerosas, varias. En una ocasión en una convivencia con señoras platiqué con una. Las dos estábamos embarazadas y llevámamos las mismas semanas aproximadamente. Recuerdo algo así:

- Hola, soy Dany. Tengo 4 meses de casada y 4 meses de embarazo.
- Hola, soy ........... (no recuerdo el nombre, así de mala es mi memoria). Tengo 12 años de casada y éste es mi 12o hijo. 

Esa sí me causó impacto. En realidad siempre que veo matrimonios que se abren generosamente así a la vida mi cabeza da vueltas y vueltas.

En la sobremesa de ayer hablábamos de cómo te ven "rarito" cuando tienes muchos hijos, o los tienes muy seguido. Es como si la gente que pregunta fuera a cuidarlos, mantenerlos, educarlos... o, como decía Haydee, te miran como si tus embarazos fueran producto de la ignorancia. Y no es así. No va por ahí. Es más, aseguro categóricamente, que es todo lo contrario.

Creo que para nadie es secreto que Jesús y yo somos de la idea de familia grande. Hay quien comienza a preguntar por el tercero. Da miedo, no...¡pavor! Es más, si uno se sienta a pensarlo mucho ¡se raja! Pero al ver a esas familias conviviendo un fin de semana ¡se antoja! Mesas grandes llenas de gente, risas, comentarios, historias, anécdotas...

Yo estoy convencida de que Mariana fue lo mejor que pude hacer por Ana Luisa. Ahora se tienen la una a la otra. Para siempre.

- Es que es una friega.
- Sí
- Es que lo pasas mal en los embarazos.
- Sí
- Es que los partos son caros.
- Sí
- Es que mantenerlos es un lana.
- Sí
- Es que las desveladas.
- Vacunas, doctores, medicinas
- Pagar escuelas
- Diversiones
- Tiempo, aténción...
- Sí, sí, sí...

Es verdad. Ninguna que sea madre puede negar todo lo anterior. Y las que tienen hijos mayores nos dirán: "¡y espérate!" Los hijos crecerán, y con ellos los problemas. Pero se irán.

Yo me quedaré con mi marido, pero no solos. Pues eso de que los hijos "se van" es mero decir... ¿verdad Teté? :)

Quiero navidades y festejos llenos de gente. De esos en los que hay que rentar mobiliario y vajilla porque no alcanza. Y que Ana Luisa me pueda repetir siendo adulto lo que me dijo el viernes: "Mami, el Bicho tiene una familia feliz"...

Que seríamos igual de felices si fuéramos 3 que si somos 10... mmm, no lo sé... Tal vez, si 3 fuera todo lo que pudiéramos ser. A mi me queda claro que ésta familia da para más...

Ya veremos en unos años hasta dónde llegamos, feliz y responsablemente.

1 comentario:

  1. Ha valido la pena la espera... a veces sólo es cuestión de dejar que el interior vuelva a encontrar confort en el ruido de la cotidianidad para que vuelva a expresar lo mucho que lleva dentro... Esperemos que Puebla te atrape pronto!!! Besos
    Gaby Perusquía

    ResponderEliminar